Toneladas de sal y 16 quitanieves para evitar las críticas en Vitoria

Sal y salmuera a toneladas en la capital verde europea, paladín de la sostenibilidad. Eso se encontraron los vitorianos en sus calles y calzadas ayer por la mañana como medida preventiva contra la nieve y el hielo que, finalmente, cayó en poca cantidad, aunque hoy se espera más. Los ecologistas se echaron las manos a la cabeza.

El Ayuntamiento de Vitoria, tiene pánico a las duras críticas que recibe cada vez que caen unos copos y la ciudad se hunde en el caos. Ocurrió el pasado día 12 de febrero en una extraña y pesada nevada que acabó con más de 5.000 árboles, aunque el espesor no pasó de 15 centímetros. Las culpas acabaron señalando a los meteorólogos.

Como ya existe una leyenda negra sobre alcaldes que no estuvieron a la altura de los temporales, el popular Javier Maroto preparó un dispositivo «con más máquinas y personal que nunca». 500 toneladas de sal, 60.000 litros de salmuera; 28 sacas de sal de 1.200 kilos distribuidos por la ciudad al servicio de los ciudadanos que también pueden usar 420 palas. Además, 21 máquinas distribuidoras de sal (saleros) y 16 vehículos con cuchillas o quitanieves. Una demostración de fuerza sin parangón que funcionó bien. Era sábado y no hubo apenas tráfico ni gente en la calle. El alcalde estuvo en todo momento al frente del despliegue, como se encargó de contar su cuenta de Twitter.

El Ayuntamiento afirma que usa la salmuera en calzadas, pendientes y puntos conflictivos y la sal, en los accesos a los centros de salud, hospitales y edificios públicos, la mayoría cerrados por una huelga de funcionarios.