Barcelona pondrá multas de 3.000 euros a los clientes de las prostitutas del barrio chino

El Ayuntamiento de Barcelona ha dado un paso más en la lucha contra la prostitución callejera, una estampa habitual en el barrio chino de El Raval y que había generado una gran controversia en la ciudad. En adelante podrá imponer hasta 3.000 euros de multa a los clientes que practiquen sexo en público -en soportales, por ejemplo- y también castigará, aunque con menos dureza, a las prostitutas, al considerarlas víctimas de la situación.

Según informó ayer la Corporación, las sanciones están contempladas en una nueva ordenanza municipal concebida sobre todo contra los proxenetas y contra los individuos que pagan por el sexo en plena calle, una conducta que está expresamente prohibida en la Ciudad Condal desde 2006, pero que no ha sido eliminada.

El cambio primordial es la desaparición del aviso previo de la Guardia Urbana. Y es que hasta ahora sólo había multa si la advertencia de los agentes era desatendida. De todos modos, durante unos cuantos días los funcionarios no actuarán expeditivamente, sino que advertirán al infractor sobre las consecuencias de la nueva normativa

«La parte más débil»

Y la principal es que las sanciones serán, como mínimo, de entre 1.000 y 1.200 euros. No obstante, cuando las conductas sancionables tengan lugar a menos de 200 metros de un centro docente, el Ayuntamiento impondrá de 1.200 a 1.500. Por último, si se produce una falta de consideración «muy grave», el castigo oscilará entre 1.500 y 3.000 euros.

Desde el lado de las trabajadoras del sexo, su actividad tendrá la consideración de falta leve, de modo que los castigos serán notablemente más suaves. En su caso, la ordenanza prevé multas de entre 100 y 300 euros. Solo cuando practiquen sexo cerca de un colegio, aumentarán de 300 a 750 euros. El Ayuntamiento insistió ayer en que, pese a tratarse de una iniciativa represiva, lo que realmente se pretende es proteger a las mujeres, pues son «la parte más débil y vulnerable» del negocio. De hecho, podrán conmutar las sanciones si aceptan participar en un curso de inserción de la Agencia por el Abordaje Integral del Trabajo Sexual.

La Corporación anunció que seguirá potenciando el auxilio a las prostitutas a través de esa agencia. En ausencia de una legislación superior, agregó el Ayuntamiento, el endurecimiento de la normativa contra el sexo en la vía pública forma parte de una «estrategia global» para erradicar «un fenómeno» que se estaba produciendo a la vista de todo el mundo. Y que «en muchos casos supone una vulneración de los derechos humanos más fundamentales».