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MAIKA SALGUERO
Sábado, 21 de enero 2012, 03:25
La Corporación de Muxika ha mostrado su rechazo frontal al polígono comarcal incluido en el Plan Territorial Parcial (PTP), que ya ha recibido el visto bueno inicial de la Diputación de Bizkaia, «debido a que el proyecto contraviene el planeamiento urbanístico de la localidad». El acuerdo se alcanzó en el pleno del jueves con el voto de calidad del alcalde, Aitor Goldaraz (Bildu), para romper el desempate alcanzado entre los cuatro ediles de la coalición y los del PNV, al abstenerse el concejal de Muxika Garbi.
El partido que lidera la Corporación justificó su oposición al polígono comarcal al entender que «está mal planteado y su ejecución perjudicará al municipio», señalaron. Los concejales de Bildu consideran que está mal diseñado al carecer de una salida de aguas y al contemplar un difícil acceso desde la carretera comarcal. «La rotonda prevista a la altura de la gasolinera no es una buena solución. Del mismo modo, que no está claro cuándo se va a llevar a cabo, ni cuánto dinero se necesitará», criticaron.
La coalición formada por EA y la izquierda abertzale argumentó también que como consecuencia de este plan se disparará el aumento del consumo de agua, con un incremento de en torno al 75%. «Además, no está garantizado el suministro, ni de qué depósito se recogerá», afirmaron.
El PNV, por su parte, defendió que la tramitación del polígono debe continuar su curso por el futuro de la comarca. «Es imprescindible, sobre todo tal y cómo está el empleo en la zona. Si Bildu quiere realizar modificaciones en el diseño del proyecto, debe sentarse con el gerente de Busturialdeko industrialdea para llegar a un acuerdo y cambiar aquello que crea innecesario», manifestó el concejal del grupo nacionalista Jon Mikel Gainza.
El rechazo del Ayuntamiento supone, en opinión de los jeltzales, una piedra en el camino en un plan prioritario para el desarrollo de Urdaibai. «Las posturas están bastante enquistadas y sólo se podrá retomar hasta que ambas partes discutan y lleguen a un consenso», insistió Gainza.
«Macroproyecto»
Los vecinos de la urbanización Alai Begira de Muxika, próxima a los terrenos en los que se proyecta ubicar el polígono comarcal, han mostrado también su disconformidad con el área industrial. Por ello, han emprendido la recogida de firmas contra su construcción, «tal y cómo está planteado».
A juicio de los residentes, este «macroproyecto» no debería edificarse en una de las zonas con mayor concentración poblacional del municipio, justo al lado del colegio. Los afectados consideran «desmesurada» la extensión de 700.000 metros cuadrados reservada para este polígono «cuando existe en Gernika suficiente superficie infrautilizada para ese uso. Además en esta época y con la que está cayendo, ¿qué empresas van a venir a instalarse aquí?», apuntan.
Los representantes de la sociedad Busturialdeko industrialdea pueden apelar la decisión municipal en el plazo de un mes mediante recurso de alzada o en el juzgado de lo contencioso-administrativo en dos meses.
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