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JAVIER MUÑOZ jmunoz@elcorreo.com
Martes, 27 de diciembre 2011, 19:04
Abdellah El Mekaoui, el peluquero marroquí homenajeado a finales de noviembre pasado por haber devuelto 400 décimos de lotería extraviados en Bilbao, ha presentado una denuncia en el juzgado de guardia en la que acusa a varios empleados de un bar de la capital vizcaína de haberles negado la entrada a él y a un amigo, y de haberles propinado una paliza al pedir el libro de reclamaciones. «Nos impidieron entrar y nos agredieron después de habernos dicho que los 'moros' no pasaban», resumió ayer El Mekaoui.
Los hechos ocurrieron sobre las siete de la madrugada del pasado 25 de diciembre en un establecimiento de la calle Ripa, el bar Ikea, en el que se agolpaban numerosos clientes que festejaban la Navidad. Los dos marroquíes aseguran que el portero, de nacionalidad argelina, les negó el acceso por su origen. Ellos replicaron que habían esperado en la cola y recalcaron que los demás clientes no podían adelantarse, por lo menos hasta que les aclararan por qué les vetaban y, en tal caso, hasta que les permitieran presentar una queja formal.
Patadas y puñetazos
Según la versión de El Mekaoui, el portero entró en el bar y al cabo de un rato aparecieron «seis individuos que esgrimían botellas en plan amenazador». Los dos inmigrantes recularon y acabaron en el suelo donde, siempre según el testimonio del agredido, recibieron patadas y puñetazos. El Mekaoui asegura que su compañero, Abderrazzak Kouhi, camarero en un municipio vizcaíno, intentó hacer una llamada por el móvil, «pero se lo quitaron y no lo ha vuelto a ver». Más tarde, él mismo dejó su teléfono al amigo y entonces éste llamó a su pareja, que avisó de inmediato a la Ertzaintza.
Los agentes escucharon a los dos inmigrantes y a los presuntos agresores, y luego solicitaron una ambulancia para trasladar a los heridos al hospital de Basurto. El Mekaoui sufrió un derrame en el ojo izquierdo, lesiones en un pie y fuertes dolores en la zona lumbar. Abderrazak tenía contusiones en la cabeza, la barbilla y la dentadura. Tras ser dados de alta en Basurto, a mediodía de ayer presentaron una denuncia en el Juzgado de Instrucción número 8 de Bilbao, que estaba de guardia.
La Ertzaintza explicó ayer a EL CORREO que, a la espera de concluir el atestado, lo único que va a hacer de momento es responsabilizar a El Mekaoui de haber faltado al respeto a los policías que acudieron a la calle Ripa. Fuentes del Departamento de Interior precisaron que los funcionarios no fueron testigos presenciales de los hechos y que se encontraron con «dos versiones». También anotaron la filiación de varios testigos presenciales de lo sucedido. «En los próximos días enviaremos el atestado al juzgado, que es el que se ocupa de este asunto, puesto que fue allí donde presentaron la denuncia», añadieron las fuentes de la Ertzaintza.
El Mekaoui pidió de antemano «disculpas» a la Policía autónoma por si «en el calentón del momento» pudo haber dicho o hecho algo que molestara a los agentes. «Pero quiero que entiendan que me ocurrió algo increíble. Estaba y estoy indignado. Tenemos el mismo derecho que los demás a acceder a un establecimiento público. Si te conduces con respeto, tienen que tratarte con respeto», afirmó.
El peluquero -que tras devolver los décimos de lotería el mes pasado fue elegido por Coca Cola para protagonizar un spot navideño- subrayó que era la primera vez que acudía al bar donde le golpearon y que nunca se ha visto envuelto en incidentes similares. «En otros establecimientos me conocen y entro con normalidad», declaró. Este periódico intentó ponerse en contacto con los responsables del bar Ikea, sin éxito, para conocer su versión.
Sos Racismo denunció que lo ocurrido en el bar de Bilbao es «otro ejemplo más» de la discriminación que sufren los inmigrantes en numerosos establecimientos de hostelería de la capital vizcaína, un problema que quedó de manifiesto en marzo pasado, cuando la ONG realizó un 'test' en nueve locales de copas de la ciudad y comprobó que ocho de ellos no dejaban entrar a los negros, musulmanes o latinos.
La asociación criticó que la Ertzaintza y la Policía Municipal no hayan elaborado aún «protocolos» para actuar en situaciones como la protagonizada por El Mekaoui y su amigo. «Nos entrevistamos con el Gobierno vasco y con el Ayuntamiento de Bilbao para abordar esa cuestión, pero es evidente que no se ha resuelto», declaró Patxi Lafuente, miembro de Sos Racismo de Bizkaia.
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