Evans pierde los nervios en el Giro

El miércoles, en la etapa lluviosa de L'Aquila, Cadel Evans se sintió solo ante el ataque de Sastre, Tondo, Arroyo, Efinkim, Wiggins y Porte. El campeón del mundo no tiene equipo. El BMC ha perdido ya a cuatro componentes y no puede arroparle. Ayer, a unos kilómetros de la meta de Porto Recanati y cuando Vinokourov, Basso, Nibali, Scarponi y Cunego habían cogido una veintena de segundos, Evans volvió a sentirse solo. Se puso nervioso y se enzarzó a manotazos con Righi, que defendía los intereres de Cunego. Mal gesto del arcoiris. Su mal genio no le sirvió para atrapar a los fugados, entre los que se impuso Pozzato, primer italiano que gana en ese imprevisible Giro.

La decimosegunda etapa comenzó con la fuga de Flens, Krivtsov y Kaisen. Luego, a falta de 12 kilómetros y tras el sprint especial de Potenza Picena, atacaron Vinokourov, Basso, Nibali y Cunego. Ni Evans, ni el líder Porte, ni Sastre, ni Arroyo lograron meterse en ese corte. Fue un susto que apenas les costó una decena de segundos en la meta.

«Tengo ganas de que llegue la montaña. Los italianos y Vinokourov están fuertes y no perdonan ni un día», declaró Sastre. Hoy, el Giro llega a Cesenático, cuna de Pantani, con dos puertos de segunda.