

Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
M. BALÍN
Miércoles, 21 de abril 2010, 11:11
Alfredo Pérez Rubalcaba reafirmó ayer que el Ministerio del Interior seguirá trabajando para conseguir las pruebas que demuestren el papel que jugaba David Pla en la banda terrorista ETA. Pese a su detención y posterior puesta en libertad ordenada el martes por la Justicia francesa, Rubalcaba se escudó en la resolución del juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska, que mantiene la imputación contra Pla por pertenencia a la banda, para sostener su acusación. El ministro reiteró que los letrados detenidos actuaban «un ratito de abogados y mucho más ratito de personas de ETA» para mantener la disciplina entre los presos etarras.
El auto del juez Marlaska dictado el lunes por la noche, en el que envío a prisión a cinco de los diez detenidos en la operación policial contra abogados y militantes abertzales, señala que Pla fue controlado cuando asistía a una cita con dos dirigentes del «aparato político» de ETA que le dieron cartas y material para repartir entre los abogados afines a la banda.
La reunión se celebró en la localidad francesa de Mimizan en mayo de 2009 y a ella acudieron los dirigentes etarras Igor Suberbiola y Jon Salaberria, detenidos tres días después en Burdeos junto al jefe político de ETA Francisco Javier López Peña, 'Thierry'. Entre medias, Pla acudió a un nuevo encuentro, en esa ocasión con el abogado Jon Enparantza, que fue encarcelado anoche por orden de Marlaska.
Los documentos que incriminan a Pla y a Enparantza fueron intervenidos por la policía en la operación de Burdeos, que también reveló la incriminación de los otros dos letrados enviados a prisión: Iker Sarriegui y Arantza Zulueta, además la empleada de ésta en su despacho Naia Zurriarai y Saioa Agirre, portavoz de Etxerat, la asociación de familiares de presos etarras. Sin embargo, la jueza antiterrorista francesa Laurence Le Vert no consideró que los indicios contra Pla fueran suficientes y ordenó su puesta en libertad, pese a que la Policía española considera que es el jefe de los abogados detenidos.
Tensiones
Rubalcaba señaló que el auto del juez demuestra que el Ministerio del Interior conocía que eran abogados «a tiempo parcial», ya que «por la tarde recordaban a los presos etarras quién mandaba». El ministro añadió que la documentación requisada ha permitido constatar lo que ya sabían: que hay «tensiones internas» entre Batasuna, los presos y ETA, en referencia a las acusaciones de «disidencia» que los letrados hicieron al ex portavoz de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi.
Por último, confirmó que avisó en persona y por teléfono al presidente del PNV, Íñigo Urkullu, de que era un objetivo de ETA, después de revelarse que Enparantza comunicó a la dirección de ETA: «Más que asesinar a Inaxio Uría (el empresario vasco), si hubieras asesinado a Urkullu hubiéramos tenido más repercusión mediática».
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.