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Los trabajos de demolición comenzaron a media ./ Foto: Borja Agudo | Vídeo: Luis Calabor
El derribo de Kukutza enciende Bilbao
Cerrojazo al gaztetxe de rekalde

El derribo de Kukutza enciende Bilbao

La entrada de las máquinas para derribar el gaztetxe provocó numerosos disturbios en la villa hasta bien entrada la madrugada y deja un reguero de contenedores quemados en Rekalde, Abando, Indautxu y el Casco Viejo

EVA MOLANO

Sábado, 24 de septiembre 2011, 12:24

La piqueta ha podido al final con el gaztetxe de Kukutza. El derribo del edificio comenzó en la tarde de ayer, después de que el Juzgado número 5 de lo Contencioso-Administrativo de Bilbao diera luz verde para ello. El miércoles, la Ertzaintza desalojó el inmueble en un dispositivo que se saldó con una treintena de heridos. Ante esta situación, la juez paró la demolición hasta ayer que, después de hablar con las partes el jueves, dio vía libre para que las máquinas hicieran su trabajo.

Sin embargo, la demolición del gaztetxe no ha sido precisamente pacífica. Al tiempo que la máquinas se acercaban al barrio, muchos defensores de Kukutza tomaban posiciones para impedir su acceso y cruzaban contenedores en la calle que luego tuvieron que ser retirados por la Ertzaintza. Desgraciadamente, estos no fueron los únicos incidentes. Desde las cinco de la tarde se han vivido momentos de gran tensión en el barrio. La Policía autonómica ha detenido a 31 personas acusadas de desórdenes públicos.

Rekalde, en pie de guerra

La de ayer fue una tarde complicada en Bilbao. El derribo del gaztetxe, o mejor dicho, el inicio de las tareas de desmantelamiento, ha producido protestas de todo tipo en el barrio de Rekalde. Primero se intentó frenar la entrada de la piqueta colocando barricadas y bloques de cemento que fueron retirados por la Ertzaintza. Pero era sólo un anticipo de lo que iba a pasar. A medida que las máquinas avanzaban, también aumentaba la tensión y la violencia.

Las calles adyacentes al local de Kukutza fueron escenario de diversos disturbios desde ese momento. Se volcaron numerosos contenedores, varios de los cuales fueron quemados, por lo que fue necesaria la intervención de los bomberos. Asimismo, también se lanzaron piedras y todo tipo de objetos a los agentes, que se defendieron con pelotas de goma de los ataques. Portavoces de Kukutza han afirmado que los ertzainas han entrado en bares y en portales. Asimismo, tras las cargas policiales, algunos heridos se refugiaron en la iglesia de Rekalde en espera de ser atendidos por los servicios sanitarios.

Pasadas las seis de la tarde, una gran excavadora inició las labores de derribo entre fuertes medidas de seguridad por parte de efectivos de la Ertzaintza. Los primeros operarios que llegaron a Rekalde realizaron su trabajo encapuchados, lo que fue reprochado por los manifestantes, que además les recibieron con gritos e insultos como "mercenarios" y "bastardos". Antes de comenzar con los trabajos de derribo, la Policía vasca permitió retirar los enseres personales del gaztetxe, siempre identificando a los individuos interesados y revisando el contenido que sacaran del local.

El centro, tomado

A las nueve de la noche parecía que la calma había vuelto al barrio. Pero fue un espejismo. El movimiento en defensa del gaztetxe trasladó sus protestas al centro de Bilbao, donde también comenzaron a sucederse los problemas. Pasadas las 21.30 horas, los disturbios se habían extendido a la zona del Ayuntamiento, Abando y el barrio de Indautxu.

De hecho, unas 300 personas se trasladaron hacia la zona del Consistorio para protestar. Parece ser que tenían intenciones de celebrar allí mismo la manifestación convocada inicialmente para las 20.00 horas en las inmediaciones del gaztetxe. Sin embargo, la Ertzaintza dispersó a los reunidos, algunos de los cuáles lanzaron piedras contra el edificio y contra las patrullas de la Policía Autónoma que se encontraban en el lugar.

Mientras tanto, los defensores del gaztetxe cruzaban contenedores a su paso por las calles Autonomía y Doctor Areilza, así como en Rodríguez Arias, Bailén, Ercilla, Plaza Bizkaia, Plaza Circular y Sabino Arana, lugares estos donde, además, les prendieron fuego provocando densas humaredas. Según informa Interior, también agredieron con objetos contundentes y lanzamiento de cohetes a las dotaciones de los Bomberos de Bilbao que acudieron a sofocar los incendios.

Sin autobuses

Los incidentes continuaron hasta las 4:15 de la madrugada, cuando las últimas tres personas fueron detenidas por cruzar y quemar un contenedor. Antes, Interior informaba de la quema de dos coches en la zona de Sabino Arana. Y el PNV denunciaba que también habían sufrido ataques los batzokis de Rekalde y del Casco Viejo, donde se han producido desperfectos en sus cristales por el lanzamiento de piedras.

A consecuencia de todo esto, los responsables municipales decidieron suspender el servicio de autobuses de Bilbao durante toda la noche. Según ha informado el Consistorio, todas las líneas fueron retiradas a cocheras, mientras que los servicios nocturnos de Bilbobús tampoco han funcionado. Esta tarde ya se habían suspendido parte del servicio: los bilbobuses habían dejado de entrar en Rekalde y únicamente llegaban hasta la plaza de Amezola.

Auto judicial

El juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 5 de Bilbao levantó ayer la orden de paralización del derribo del gaztetxe Kukutza. Según fuentes judiciales, la juez dictó una resolución en la que se acordaba levantar y dejar sin efecto la medida cautelar adoptada el miércoles de manera urgente y que paralizó la orden de demolición del inmueble, después de que quedara vacío tras desalojar la Ertzaintza a sus ocupantes, lo que dio lugar a incidentes.

La resolución se adoptó tras celebrarse el jueves una vista oral en la que la jueza escuchó los argumentos de las tres partes implicadas, el propietario del solar, el Ayuntamiento y la asociación vecinal Errekaldeberriz Auzo Elkartea, que reclama el mantenimiento de dicho centro cultural juvenil. Así, la jueza ha desestimado la apertura de un juicio para analizar la legalidad de la orden de derribo, que, según había argumentado el abogado de la citada asociación de vecinos, incumplía el Plan General de Ordenación Urbana de Bilbao.

En el auto se precisaba que el edificio de Kukutza "no está incluido" en ningún régimen de Protección, ni en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), ya que se encuentra "fuera de ordenación expresa", según el uso previsto en el PGOU, que lo considera de uso residencial. Igualmente, interpretó como "carente de recibo" la alegación del abogado de la Asociación de Vecinos Errekaldeberriz, que logró paralizar el derribo durante 48 horas, acerca de que el proyecto no contiene el preceptivo programa de gestión de residuos exigidos en el Real Decreto 105/2008 ya que, en la memoria de gestión de residuos de junio de 2011 del Gobierno vasco, se considera "adecuada la propuesta de actuación realizada por la Cooperativa Ondoan para el derribo y gestión de los residuos del edificio".

Por otra parte, el auto afirmaba que la parte recurrente, es decir, la Asociación de Vecinos de Rekalde, "no ha aportado ningún principio de prueba suficiente en relación con los perjuicios irreparables derivados de la inmediata ejecutividad" del derribo. Además, la juez señalaba que "debe considerarse prevalente el interés público en la ejecución de las previsiones del PGOU" así como "los perjuicios que puedan ocasionarse a la codemandada Cavisa S.A., en cuanto a la demora de la promoción proyectada en el inmueble".

Por todo ello, consideró que "no pueden obviarse" los derechos del legítimo propietario, por lo que acordó "levantar y dejar sin efecto la medida cautelar adoptada con carácter urgente" el pasado miércoles. Además, autorizó la ejecución de la licencia de derribo del inmueble situado en el número 1 del camino Iturrigorribidea y en Estrada de Caleros número 2 de Rekalde, donde se ubica el espacio cultural de Kukutza.

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