Borrar
ANÁLISIS

Excepcional brillantez

KARMELO ERREKATXO

Domingo, 11 de mayo 2008, 04:19

La joven y muy capacitada organista Lydia Ksiazkiewicz, (Poznan l977) ofreció un programa de gran envergadura musical. Comenzó con el 'Preludio y Fuga BWV 543' de Bach. Fue primera ocasión para apreciar su excelente técnica. Del francés N. de Grigny, coetáneo de Bach, se escuchó con gran claridad una pieza 'Himno -Pange lingua-', de marcado carácter francés. La 'Sonata op. 65 nº 3', de Mendelssohn y el 'Preludio y Fuga sobre Bach', de Liszt, fueron dos buenos ejemplos de majestuosidad organística.

Para la intérprete no parece que existan dificultades en la ejecución de las más complicadas piezas. En la segunda parte, con la 'Sinfonía segunda' de Vierne, que tocó de memoria, como alguna otra pieza, el recital alcanzó carácter de excepcional brillantez.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Excepcional brillantez