Urkullu mantiene su hoja de ruta pese a la tensión en Cataluña y el acoso de EH Bildu y Podemos

En su intervención de la mañana, el lehendakari había asegurado que «la salida del laberinto político territorial se encuentra en el horizonte del Estado confederal». Urkullu no se ha apartado de su tono pactista y ha recordado que siempre se ha mostrado «prudente» y respetuoso con el camino emprendido por los independentistas catalanes «pero la manera de gestionar el conflicto suscitado ha desbordado algunos límites que requieren un pronunciamiento expreso», ha denunciado. Por eso, el lehendakari ha insistido en la necesidad de buscar una «solución política negociada» que, como punto de partida, reconozca la existencia de «un conflicto entre voluntades sociales mayoritarias que, en cuanto a su proyecto nacional, se manifiestan de formas divergentes en Cataluña, en Euskadi y en el resto del Estado español».

«El conflicto sobre Cataluña debe ser trasladado de un marco de enfrentamiento agonístico a un marco de diálogo político e institucional. Es necesario llevarlo del callejón sin salida a la mesa de diálogo», ha reivindicado, tras poner como modelo, una vez más, el referéndum pactado que se celebró en Escocia y emplazar directamente al Gobierno central a abrir la puerta a una vía negociada. «Ni la imposición, ni la vía judicial y, mucho menos, la vía penal son la solución», ha advertido, convencido de que, llegados a este punto, el «reto» más urgente es evitar «cualquier forma de fractura social o política».

En los turnos de réplica tras el discurso de la mañana, la portavoz de EH Bildu, Maddalen Iriarte, ha llegado a decir al lehendakari que su apoyo al pueblo catalán no es creíble. «A usted le molesta la independencia del pueblo catalán», ha asegurado Iriarte. La representante de la izquierda abertzale ha criticado también que Urkullu pusiera en solfa el referéndum catalán y le ha reprochado sus acuerdos con el PP. «Usted quiere hacer amigos, pero hacerlos en Madrid», ha agregado antes de cerrar su intervención con una frase de la activista por los derechos de los negros en Estados Unidos, Rosa Parks. «Cuanto más obedecemos peor nos tratan».

Desde las filas de Elkarrekin Podemos, su portavoz Lander Martínez ha señalado que «no se puede decir Cataluña no va a llegar a nada y decir que nosotros somos buenos negociadores, porque Cataluña ya ha llegado y ha conseguido empezar a deshacer las costuras de un estado que tiene múltiples carencias democráticas y aquí se nos hace creer que la nuestra es una relación bilatera». Martínez, que también ha sido muy crítico con las políticas sociales y económicas del Gobierno vasco. «En la política vasca y especialmente en el Gobierno vasco se le ha mirado con cierta vanidad y soberbia a Cataluña», ha agregado.

Por su parte, los socialistas se han querido presentar como los garantes de que en la política vasca no tomará los mismos derroteros que la catalana. «El Gobierno vasco no nos devolverá a abismos a los que ya se asomó Euskadi. Donde estemos los socialistas no se tomará una sola decisión que nos lleve al enfrentamiento», ha señalado la secretaria general de los socialistas, Idoia Mendia. Con respecto al nuevo Estatuto, los socialistas han defendido el consenso y los acuerdos en el seno de la ponencia del Parlamento vasco que estudia la mejora del autogobierno. «Necesitamos un nuevo Estatuto que sirva para nacionalistas y no nacionalistas», ha sentenciado.

Por su parte, el portavoz del PP, Alfonso Alonso, se ha vuelto a ofrecer a Iñigo Urkullu para llegar a acuerdos pero no ha dejado de pedirle «claridad» en sus propuestas. «Usted dice que está dispuesto a llegar a acuerdos con todos los partidos pero reconocerá que no es lo mismo Podemos que el PP. Por eso me encantaría que me dejase claro cuáles son sus posturas», le ha espetado. En otro momento de su intervención, el dirigente popular se ha referido a la propuesta de modificación del Estatuto y se ha mostrado partidario de «discutir lo que se quiera pero dejar las cosas como están. Miren qué está pasando en Cataluña y piensen si queremos que se repita lo mismo en el País Vasco», ha insistido.

El portavoz jeltzale Joseba Egibar ha respondido a las acusaciones de la oposición y ha defendido la postura del lehendakari con respecto al acuerdo. A la portavoz de EH-Bildu le ha acusado de actuar con «desfachatez» por la incoherencia de exigir una radicalidad al PNV que sin embargo no coincide con las conversaciones privadas que tienen, por ejemplo, con respecto a los presos de ETA, en la que la izquierda abertzale pide a lo jeltzales que haban valer sus acuerdos con los populares. Con respecto al PP, Egibar ha puesto en duda unas declaraciones de Alfonso Alonso en la tribuna, en las que se confesaba incapaz de ser nacionalista, y le ha espetado: «Quien no es nacionalista es imperialista».