«No tenemos más que problemas por el nuevo nombre del barrio»

Los vecinos del Grupo Serantes (antiguo Larrea), en Santurtzi, están que trinan. El cambio de nombre del barrio, ubicado en la parte alta, entre Peñota y Santa Eulalia, está ocasionando numerosos trastornos a sus residentes debido a la confusión que genera que exista otra calle denominada Camino Serantes, situada en Mamariga. El Ayuntamiento inició hace un año un proceso participativo para cambiar de denominación a parte del callejero del pueblo que aún contaba con reminiscencias franquistas por la Ley de Memoria Histórica.

Tras una votación popular, se decidió cambiar el nombre de la calle José María Larrea el primer alcalde de Santurtzi en el franquismo por la de Grupo Serantes. Ahora, la asociación vecinal, Ikusle Alai, denuncia que desde que se hizo oficial el cambio en octubre, se han dado casos de ambulancias que se equivocan de dirección o cartas que no llegan. «No tenemos más que problemas desde que han puesto el nuevo nombre. Nos vienen cartas que no son nuestras, pedidos que no llegan...», señala José María Casas, presidente de la agrupación. Él mismo se dio de bruces con el problema cuando hace unas semanas tuvo que llamar al 112 para que atendieran a su mujer por una caída. «La ambulancia se fue a Mamariga. Ella tenía una herida de diez grapas y la estaban buscando en otro barrio. No sabría decir lo que tardó en llegar, pero mucho. Llamé varias veces», dice. Un caso similar le ocurrió a otra vecina, cuyo padre sufre alzhéimer.

Asimismo, los pedidos no llegan: una residente estaba a la espera de unos muebles que se fueron para Mamariga y otra señora no recibió los regalos de Reyes. Pero también se están generando problemas a la inversa. Al Grupo Serantes le ha llegado una carta de un IBI impagado que corresponde a un trastero del Camino Serantes. «Es el propio Ayuntamiento el que la ha mandado. Les pone que tendrán que pagar el recargo por un error de dirección. Un despropósito», lamenta Casas.

Escrito al Ayuntamiento

El cambio de nomenclatura ya se topó con el rechazo del antiguo Grupo Larrea desde que el Consistorio anunció el inicio del proceso. Por costumbre o sentimentalismos, los vecinos reunieron firmas para que se mantuviera solo el apellido, Larrea, muy común en el municipio y que no tiene por qué seguir rindiendo homenaje al exalcalde franquista. «Aquí José María no lo dice nadie. Todo el mundo dice Larrea o Grupo Larrea. Es una identidad nuestra. El fascista fue él, pero Larreas hay muchos en Santurtzi», arguyen.

Pero la petición no surtió efecto y en el proceso participativo el nombre de Grupo Larrea a secas no quedó seleccionada entre las tres finalistas, que fueron Lagun Zaharrak, Frontón y el ahora polémico Serantes. «Nos dijeron que estaríamos haciendo trampas». Así, la idea de la asociación es hacer llegar un escrito al Consistoio advirtiendo de la situación «para ver si hay alguna solución». «Prefiero que vuelvan a cambiar la calle y hacer todo el papeleo a que, al final, en vez de la ambulancia, venga la funeraria», zanja el presidente de la asociación.