Borrar
Urgente Sánchez no acudirá al funeral y envía a Díaz y a Montero
El conocido 'Camino negro' o 'Bide Baltz' de Durango reforzará su iluminación, tal y como contempla el Ayuntamiento. MAIKA SALGU8ERO
Durango aspira a convertirse en una ciudad amigable para las mujeres

Durango aspira a convertirse en una ciudad amigable para las mujeres

Evitará la construcción de nuevos puntos negros, aceras estrechas, bordillos elevados o espacios angostos e inseguros

MANUELA DÍAZ

DURANGO.

Sábado, 13 de enero 2018, 01:00

Durango se ha propuesto que sus calles y plazas sean lugares no discriminatorios en los que las mujeres, que representan la mitad de la población en la villa, se sientan seguras, visibles y reconocidas en la vida diaria. Ya ha comenzado a dar pasos en este sentido, eliminando los puntos negros del mapa de la Ciudad Prohibida que elaboraron las vecinas hace algo más de un año. Ha dado también nombre de mujeres insignes tanto a la biblioteca como a dos parques de la villa. Y ahora se ha volcado en incorporar la perspectiva de género en la ordenanza de Mejora Ambiental en la Construcción de Edificios de Viviendas y Oficinas.

Este paso evitaría la nueva construcción de subterráneos, recovecos y espacios no diáfanos que generan inseguridad y limitan el libre movimiento de las mujeres. «El Consistorio lleva años realizando intervenciones para integrar la perspectiva de género en el urbanismo, básicamente en edificaciones ya construidas», tal y como ha explicado la concejala de Igualdad, Pilar Ríos. Los últimos trabajos se ejecutaron a finales del pasado año con la mejora de la iluminación en la calle Oiñiturri. Quedan pendientes la zona de la biblioteca, la trasera de la Askatasun Etorbidea y el conocido 'Bide baltz'.

Todos estos puntos negros se señalaron en el último mapa de la Ciudad Prohibida. «Ahora queremos ir más allá integrando la perspectiva de género en las herramientas de diseño urbanístico», adelantó Ríos. Un hecho que obligará a que las futuras edificaciones se pongan en la piel de las mujeres antes de construir con actuaciones en percepción de seguridad en el diseño de los espacios y movilidad cotidiana. Y no es algo que suene a lejano. Según Ríos, «las primeras estimaciones del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) prevén la construcción, en los próximos quince años, de 3.000 viviendas que se verían afectadas por la nueva ordenanza».

Además de garantizar que no se creen nuevos puntos negros en la villa -el último mapa de la Ciudad Prohibida recogía 33-, se pondrá el foco en impedir zonas de difícil acceso, con aceras estrellas o bordillos sin rebajar que impidan el paso con carritos para niños o ancianos.

Ordenanza

Según Ríos, el objetivo es «garantizar el trabajo de crianza y cuidados», algo que históricamente han realizado las mujeres y que «está empezando a cambiar». Desde las instituciones «queremos alcanzar la igualdad de derechos y responsabilidades, tanto en el ámbito público como en el privado», destacó.

La empresa Tipi, que ya se ocupó de elaborar el segundo Mapa de la Ciudad Prohibida, ha comenzado esta semana los trabajos para desarrollar la ordenanza. Su coste contará con la subvención del departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno vasco y ha obtenido la máxima calificación entre todas las propuestas presentadas por diferentes municipios vascos.

El diseño de la nueva ordenanza tendrá además muy en cuenta la aportación ciudadana, para «posibilitar que este cambio de perspectiva en el urbanismo se consolide en el futuro», explicó.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Durango aspira a convertirse en una ciudad amigable para las mujeres