Landa firma por dos años con el Sky

Ayer, en la jornada de descanso del Tour, se confirmó una noticia prácticamente cantada desde hace semanas. Mikel Landa correrá en el Sky de Chris Froome las dos próximas temporadas. El interés de Movistar y Katusha las últimas jornadas había añadido algunas gotas de incertidumbre al posible destino del escalador de Murgia. Sin embargo, prácticamente desde que acabó el Giro de Italia, tenía la decisión tomada.

Las jornadas de descanso en la ronda gala suelen aprovecharse para el mercadeo; días para la intervención de representantes, negocios y fichajes. El agente de Landa, Michelle Aquadro, no desaprovechó el tiempo. Ya con la decisión en la cabeza, procedió al cierre de la operación con las firmas de las partes implicadas. A partir de ahora, al alavés le queda una temporada tranquila en lo profesional, con un futuro asegurado. Y aunque en su equipo, el Astana, no haya podido sentar bien este anuncio, tampoco influirá demasiado en la carretera. Ninguneado en sus meses de enfermedad, el pasado invierno, y postergado a un claramente inferior Fabio Aru en el Giro -pudo haber peleado por el triunfo en la general-, el alavés se sentirá liberado para acometer retos muy relevantes. La Vuelta a España será uno de ellos.

Papel protagonista

Landa aterrizará en 2016 en un equipo que carece de un corredor de su perfil. El Sky dispone de un superclase como Froome, pero en su excelente nómina de ciclistas no hay ahora mismo un segundo líder para grandes rondas de menor rango que el Tour; es decir, que el Giro o la Vuelta. Mientras maduran proyectos como Kennaugh o Thomas -Porte se va al BMC-, el de Zuia puede gozar de jerarquía en esas carreras por etapas. Como él mismo confiesa en su entorno cercano, el Tour deberá esperar hasta sentirse más maduro. Hasta entonces buscará exhibiciones como las que regaló en el Giro.