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San Mamés, iluminado con los colores de la Champions, podría ser sede de una final continental de rugby.
Bilbao pide la Champions de rugby de 2018 para San Mamés
Nueva candidatura

Bilbao pide la Champions de rugby de 2018 para San Mamés

El alcalde destaca que «el Tour va a venir» y demanda «a voces» una final de la Liga Europa

Javier Ortiz de Lazcano

Viernes, 16 de diciembre 2016, 02:31

El Ayuntamiento de Bilbao ha solicitado a la European Professional Club Rugby que el estadio de San Mamés sea sede de la final de la Champions de ese deporte en 2018, según ha podido saber EL CORREO. Es un acontecimiento de tremendo impacto mundial porque se trata de la máxima competición continental de clubes. El pasado año este partido se jugó en el nuevo estadio del Olympique de Lyon, que se llenó hasta los topes. 58.000 espectadores fueron testigos del triunfo del Saracens londinense sobre el Racing 92 parisino.

La competencia es dura. Dos grandes ciudades del Reino Unido, Cardiff y Newcatle, han pedido también ser sede de la final. La ciudad galesa tiene uno de los templos de este deporte, el Millennium Stadium, con aforo para 75.000 espectadores. La localidad del norte de Inglaterra es sede de uno de los principales equipos ingleses, los Newcastle Falcons. Una final en San Mamés tendría un gran impacto económico y de proyección de imagen para la ciudad. Decenas de miles de hinchas de los finalistas acudirían a Bilbao y el partido sería visto por millones de telespectadores.

La posible llegada del rugby a San Mamés confirma a la infraestructura inaugurada en 2013 como el principal escenario con su aforo de 53.000 personas para espectáculos de gran envergadura de Euskadi. A los partidos del Athletic se unirá en breve el concierto de Guns NRoses y en 2020 la Eurocopa de fútbol. En medio, el rugby puede ser el primer deporte ajeno al fútbol en disputar un partido en San Mamés.

El antecedente de San Sebastián anima a Bilbao. Anoeta se ha llenado en los partidos europeos que han jugado allí el Aviron Bayonnais y el Biarritz, así como en el derbi de ambos clubes. El reciente Estados Unidos-Tonga reunió a 14.000 espectadores, pese a que no se trataba de un partido de primera fila.

Bilbao puede intentar además traer antes de 2018 un partido de élite mundial. El Ayuntamiento valora una vieja idea, la de traer a la selección de Argentina. Su rival, como es norma en este deporte, lo decide la International Rugby Board. Una ciudad solicita que un equipo le visite y es la agrupación internacional quien le busca un rival de su nivel. Una partido entre Argentina y un equipo de potencial similar tendría una gran repercusión y llevaría a decenas de miles de personas al estadio rojiblanco.

«Trabajando con el rugby»

«Estamos trabajando con el rugby. Mañana (por hoy) veremos qué ocurre en ese ámbito», dijo en tono enigmático ayer el alcalde, Juan María Aburto. El primer edil quiere que la capital vizcaína se exhiba ante el mundo a través de grandes acontecimientos deportivos. Ser sede del Mundial de baloncesto2014, de dos finales de etapa de la Vuelta, de dos concursos de saltos de Red Bull y del Mundial2016 junior de badminton han permitido demostrar a Bilbao «que es una gran ciudad», destacó Aburto.

En sus plantes inmediatos, asimismo, tiene en mente el Tour. Las gestiones con la ronda gala van por buen camino y el optimismo crece en el Ayuntamiento. Todo apunta a que la principal prueba ciclista del mundo pise en su modalidad masculina Bilbao en 2019. El alcalde no tiene ninguna duda. «Vino la Vuelta y va a venir el Tour», dijo rotundo.

También quiere una final de la Liga Europa, una opción poco probable antes de 2020 porque la UEFA quiere compensar con estos torneos a ciudades que no serán sede de la Eurocopa que sí recalará en Bilbao. La sede de esta campaña se va a Estocolmo, eliminada en la carrera para la Euro, y la de la próxima a Lyon, ya que Francia ya ha celebrado el torneo por países este año y no lo recibirá en 2020.

Las fuentes de la Federación consultadas por este periódico insisten en que desde la UEFA les indican que hay muy pocas opciones de ser sede antes de 2020. Aburto no habló ayer de fechas, pero sí de que quiere el partido. «Está en nuestro guión de manera clara», indicó.

De hecho, aprovechó la presencia en Bilbao del presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, para hacer campaña. «Hemos estado tomando un café», dijo cuando se le cuestionó si había abordado el asunto con el esloveno. «La final de la Liga Europa la pedimos a voces. Queremos ser sede de una». Frente al pesimismo federativo a corto plazo, el primer edil no arroja la toalla. «La sensación que se han llevado de nosotros la Federación y la UEFA es muy buena y debemos seguir trabajando».

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